7 nov 2011

Ejército de LUZ


Después de tanto imaginar este momento con imágenes sacadas de películas bélicas hollywoodenses, el día llegó. El boquerón partió hacia Cádiz. Y no se fue de vacaciones. Se fue al Ejército. Un desconocido podría pensar que está loco, que hay miles de opciones más en la vida como para ir a parar ahí. Quien lo conoce sabe que eso no es así.

El boquerón tomó un camino, dispuesto a luchar y a no resignarse. Para mí el es un ejemplo de lucha. Porque, como espartano que es, sabe bien que enfrentará esas sombras que lo persiguen de tanto en tanto. Y sus adversarios seguro serán duros y deberá ser fuerte, pero aún así hoy conserva su sonrisa. Porque tiene una convicción muy fuerte, aprender a ser feliz. Y no dudo en que esto será así.

Como chuleta argentina que soy, a miles de km de distancia, no me queda más (ni menos) que acompañarlo con el corazón. Y desearle con todo mi amor lo que esta foto le augura. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario